Sin embargo hay que ser el más vil de los incrédulos para no percatarse de que nuestra ciudad hace ya un buen rato está adquiriendo nuevos y refrescantes aires. Un nuevo espíritu se respira en el ambiente , en el que prima el rescate de lo urbano, del callejeo, de la bicicleta y la reivindicación de los espacios públicos como espacios democráticos de expresión, tolerancia y libertad, alejado de ese extraño conservadurismo y miedo al ridículo que tanto nos ha estancado desde tiempos inmemoriales como sociedad .
Así como nuevos aires se respiran en el ambiente, nuevos sabores van desentrañándose desde el Underground de la urbe. Sabores que nos identifican como cultura y nos definen como sociedad. Saboresmulticulturaless, atrevidos y de los mas variados. Ahí. Al alcance de nuestra mano y en muchos casos camuflados en vitirinas alejadas de pomposidad, a la vuelta de la esquina.
Me gustó, a no abandonarlo y a perfeccionarlo a diario!!!
ResponderEliminar